Noticias
Lewis Hamilton, consagrado campeón mundial de la Fórmula 1 por cuarta vez este domingo en el Gran Premio de México, no sólo dominó a sus rivales en la pista esta temporada: es el más codiciado por las grandes marcas y el mejor pagado en la categoría reina del automovilismo.
El británico es el décimo deportista mejor remunerado en el mundo según la revista Forbes, sus ingresos este año se estiman en casi 39 millones de euros, incluyendo 32 millones por salarios y bonos, y 6.7 millones por contratos de publicidad.
Con una fortuna personal estimada en 170 millones de euros, el piloto de Mercedes es el 838 contribuyente británico más rico, según el Sunday Times.
Sus rivales Sebastian Vettel y Fernando Alonso están lejos de tener el mismo éxito.
De los 32.5 millones de euros obtenidos por el discreto alemán, solo 420 mil provienen de contratos publicitarios. El español registra unos 30 millones de euros en ingresos, de los cuales 1.7 millones provienen de patrocinadores.
Aparte de los contratos relacionados con su escudería (AMG, Petronas, IWC, Epson, Hugo Boss), Hamilton presta particularmente su imagen al fabricante estadounidense de equipos de audio Bose y a la marca de cosméticos L'Oreal, como Michael Schumacher antes de él. También codiseñó dos modelos para la marca de motocicletas MV Agusta y creó una bebida energética para Monster Energy.
Para administrar sus negocios dispone de su propia empresa, Project Forty Four (Proyecto 44, su número en la F1).
Hamojis
El secreto de este atractivo, según Hervé Bodinier, director general de Lagardère Plus, una agencia de consultoría para marcas, es que Hamilton es "el único piloto que sobrepasa el alcance de su deporte".
"Es un gran showman, ideal para la F1", dice el expiloto francés Jean Alesi, "y a todos los patrocinadores les encanta".
El británico construyó una notoriedad que no se había alcanzado desde Michael Schumacher, según un estudio del grupo de medios especializado Motorsport Network y la firma Nielson Sports, cuyos resultados se dieron a conocer en el marco del GP de Mónaco en mayo.
Cercano a numerosas celebridades y acostumbrado a desfiles de modas y fiestas donde no pasa desapercibido, Hamilton incursionó en el mundo de los éxitos taquilleros del cine (Cars, Zoolander 2) y los videojuegos (Call of Duty).
Su uso asiduo de las redes sociales también le genera ingresos, con 4,9 millones de seguidores en Twitter en octubre de 2017, cuatro millones en Facebook y cinco en Instagram, además de Snapchat (contra 670 mil, 630 mil y 1.1 millones de Max Verstappen por ejemplo).
Al igual que Alonso, también tiene desde hace algunos meses sus propios emojis, llamados "Hamojis".
"Hamilton tiene las cualidades del piloto, una personalidad atractiva y utiliza todos los medios modernos de comunicación", resumió Hervé Bodier, que trabajó con él en el pasado. "Eso es lo que lo hace fuerte como marca: para los amantes, su rendimiento y, para los no iniciados, es uno de los pocos deportistas que son citados en todo el mundo".
Menos que CR7
Tantos argumentos que no deben desagradar a los nuevos dueños de la F1, el grupo estadounidense Liberty Media, que hace de las redes sociales y el entretenimiento desde enero sus prioridades.
Pero si el británico tiene una vuelta por delante de sus adversarios, sus 6.7 millones de euros en contratos de publicidad son muy pocos frente a los 27 millones del astro portugués Cristiano Ronaldo del Real Madrid, que encabeza el ranking de Forbes con 78 millones de euros de ingresos totales.
"Los pilotos de F1 tienen pocos contratos personales porque no tienen mucho tiempo para hacerlos y poco espacio de comunicación para exhibirlos en su traje o casco", explica Hervé Bodinier.
"Cuando está con Mercedes, Hamilton tiene al menos siete contratos que el equipo le exige cumplir", dice, "y no puede tener marcas competidoras para patrocinadores externos, lo cual es un lastre para el desarrollo de su propia marca".
Aunque, en este punto, el británico no es el alumno más aplicado, porque se exhibe regularmente con trajes que no son diseñados por los patrocinadores de su equipo en la F1, Puma, Mercedes y Hugo Boss.