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Por: Rodrigo Castañón Por primera vez en la historia de la Fórmula 1 un aficionado tendrá la oportunidad de mostrar la bandera de cuadros en un Gran Premio. Lo podremos ver este fin de semana en el circuito Spielberg de Austria. Es un honor que no muchos llegan a tener y que típicamente se reserva para los oficiales de pista. Pero en un intento por promover la interacción dentro y fuera de la carrera con los espectadores, se hará una excepción. Aunque no haya sido exactamente igual, ésta no es la primera vez que se observa a alguien ajeno o nada relacionado con el deporte con la oportunidad de ondear la bandera. En en el Gran Premio de Brasil de 2002, la leyenda del fútbol Pelé desempeñó el mismo rol. https://www.youtube.com/watch?v=kRyKox3-hVs Bueno, lo desempeñó entre comillas, porque en realidad fue un enorme fracaso. Por razones desconocidas Pelé llegó tarde a la plataforma y Michael Schumacher, quien ganó ese Gran Premio, no recibió el banderazo al cruzar la línea de meta. Y no la recibió el segundo, ni el tercero tampoco… Apenas fue volada la bandera cuando iba a cruzar el piloto nipón Takuma Sato, en noveno lugar. Esperemos que esta vez la ejecución y el rol de banderero resulte más adecuada.

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