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Existe un factor que es bastante único en NASCAR: a diferencia de otras disciplinas de racing, en NASCAR, el terminar la carrera te embolsa puntos, razón por la que muchos pilotos corren sus semi destruidas máquinas hasta la línea de meta. No obstante, nadie lo ha hecho notar tanto como el piloto de Richard Childress Racing, Austin Dillon.
17 paradas a los pits, 4 percances y se le terminaron las llantas… tercer lugar
https://www.instagram.com/p/BE4gf9JG8d1/ No sólo eso, en un momento de la carrera Dillon, a bordo del afamado Chevy número 3, estuvo en la posición 32 y el corredor en la primera posición le tenía una ventaja de una vuelta. Es verdaderamente impresionante que con todos los eventos desafortunados que le ocurrieron al piloto estadounidense, cruzara la meta en tercer lugar. "El auto fue destruido y logramos llegar a casa con un tercer lugar. Qué buen día”. –Austin Dillon. El piloto de 26 años de edad pudo mostrar al mundo cuánto importa la habilidad y experiencia detrás del volante en las carreras de NASCAR. De igual manera, fue un gran trabajo en equipo de parte del equipo Richard Childress Racing, logrando que el Chevy #3, aunque lleno de cinta adhesiva y abollado, se mantuviera en lo alto y terminara en tercera posición. Por: Bjork Olsson.