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Caminar por Melbourne es recorrer una ciudad grande que no parece tal. Sus pobladores se expanden hacia los lados y no hacia arriba, por lo que no es común ver grandes edificios. Melbourne ofrece lo bueno de las grandes ciudades pero no sufre las vicisitudes habituales de ser una de ellas. Parece diseñada para que nadie logre desesperarse, para que cada fin de semana los bares y calles se llenan de aficionados pintados y vestidos con los colores de sus equipos, para recordar que, más allá de ser una ciudad internacional, Melbourne es Australia.
Pero este fin de semana será diferente debido a que inicia una temporada más de la Fórmula 1. A pesar de las nuevas reglamentaciones, se siente igual o más emoción por descubrir qué sorpresas nuevas nos traerá este año el Gran Premio. Serán 21 pruebas llenas de dimes y diretes (seguramente) a lo largo de la temporada. La primera cita es en Australia. Albert Park, en Melbourne, es el escenario tradicional de esta competencia, que será sede de las escuderías en la primera fecha de la temporada que concluirá del 23 al 25 de noviembre en Abu Dhabi.
El Tradicional Albert Park
Albert Park es el marco ideal para encender la pasión de los aficionados bien informados. Desde 1985 el Gran Premio de Australia ha sido un evento fijo en el calendario de la Fórmula 1. La carrera ha tenido dos hogares desde entonces: Adelaida (1985-'95) y Melbourne (1996-presente) en el ya mencionado Albert Park. Cabe decir que Melbourne también es la sede del Abierto de Australia de tenis (uno de los cuatro torneos de Grand Slam), la Melbourne Cup de carreras de caballos, los mundiales de surf en Bells Beach y en Phillip Island -que se encuentra a sólo 50km de distancia-, así como la carrera de MotoGP de Australia.
Para esta temporada la Fórmula 1 no modifica la normativa deportiva (ahora que ya ha conseguido que se entienda), y técnicamente sólo introduce algunos retoques estéticos, que complementan las novedades del curso pasado, que buscaban más espectáculo en la pista con autos más rápidos. Estas son las 6 diferencias de la F-1 respecto a la temporada del 2017.
- El Halo
En julio de 2017, el Consejo Mundial de la FIA escogió el halo como dispositivo de seguridad para la cabeza de los pilotos a partir de 2018. El halo protector, probado por los equipos durante los ensayos de 2016, consiste en una barra de titanio en forma de flecha sobre el cockpit (cabina), que se apoya sobre el chasis justo en el centro del campo de visión.
Según los pilotos, este brazo de sujeción no afecta su visibilidad, porque conducen mirando al fondo y no se enfocan en primer plano. “Es una protección para la cabeza, por lo que no debería haber ningún debate sobre ello”, Fernando Alonso rechazaba así la polémica. En principio, el halo debería proteger la cabeza del piloto del impacto de objetos grandes como ruedas, una parte de chasis desprendida, un bólido descontrolado o, también, en caso de vuelco.
- Nuevos neumáticos
La única novedad técnica que puede incidir en los adelantamientos es la introducción de un tipo de neumático más blando todavía en esta gama, el P Zero híper-blando, de color rosa. “Esto debería ayudar a incrementar aún más la velocidad y el espectáculo”, comentaba Mario Isola, responsable deportivo de Pirelli.
- McLaren con Renault, Toro Rosso con Honda
Entre las 10 escuderías, dos han optado por cambiar de suministrador de motor: McLaren se asocia con Renault hasta el 2020, una ventura conjunta inédita en los 52 años de la escudería inglesa, que con la firma francesa busca encontrar el buen rendimiento y la fiabilidad que no le dio Honda en los últimos tres años.
Por el contrario, Toro Rosso deja Renault por Honda; un contrato de compromiso para que los nipones no dejen la Fórmula 1 y puedan evolucionar su propulsor en un equipo pequeño, sin tanta presión, y equipararse a los motores Mercedes, Ferrari y Renault.
- Regresa Alfa Romeo
Vuelve un nombre histórico a la F1, aunque, de momento es solo eso, un nombre: Alfa Romeo es el patrocinador principal de la escudería Sauber (ahora, Alfa Romeo Sauber), que sufría apuros económicos. De este modo la marca regresa a la F1 33 años después de su última aventura como escudería (1979-1985).
Alfa Romeo fue la primera ganadora del Mundial de F1 (Farina, 1950; y Fangio, 1951). También modifica su nombre Red Bull con la incorporación de Aston Martin como patrocinador principal: la escudería energética se llama ahora Aston Martin Red Bull Racing.
- Dos caras nuevas: Leclerc y Sirotkin
Sólo dos novatos se estrenan en la parrilla. El monegasco Charles Leclerc, de 20 años, campeón de la F2 y joven piloto de Ferrari correrá para Sauber después de haber sido su tercer piloto en las últimas cuatro carreras del 2017.
El ruso Sergei Sirotkin, de 22 años, expiloto de GP2 y de las World Series, compite para Williams. Convenció al equipo inglés para dejar como tercer piloto a Robert Kubica.
- Adiós a las “Grid Girls”
Las “grid girls”, serán sustituidas por niños, jóvenes pilotos de karting, para así evitar situaciones de sexismo. “No creemos que la práctica sea apropiada o relevante para la F1 y sus aficionados, antiguos o nuevos, en todo el mundo; las “chicas de la parrilla” no encajan con los valores de la marca”, justifica Liberty Media en su voluntad de modernizar la F1 y abrirla a nuevos públicos.